Francisco Oltra

Con esta historia no pretendo juzgar a nadie ni tan siquiera ensalzar virtudes o criticar maldades. Solo se pretende mostrar una verdad que mi familia vivió con la república, la guerra, postguerra y dictadura.

Son páginas que yo, nacido en el 48, viví contadas por mi madre, hermanas y tios. Lamentáblemente mi padre murió en 1950 tiroteado, junto con un grupo de compañeros anarquistas como él y que iban a ser pasados a trabajar a francia por un grupo de maquis españoles.

Era un persona buena pero no supo abandonar la política y vivimos dos vidas paralelas. Él con sus maquis en casa, propaganda, liberación de presos... y nuestro tio Luis, artesano como el que con lo que ganó boxeando montó una fábrica de muebles y vivimos bien con su ayuda. Los dos fueron policias antes y durante la guerra, fueron encarcelados y liberados al no tener delitos de sangre.

Francisco Oltra Paricio murió el 10 de septiembre de 1950 en el monte Padrós en Santa María de Marles, en Barcelona. Fué enterrado en el cementerio de San Pablo de Pinós.

Nació el 26 de febrero de 1911 por lo que tenía 39 años de edad.


Calle de JesúsEstamos en 1950. La guerra hace tiempo que terminó pero las últimas consecuencias de una guerra fratricida todavía llena de dolor a muchas familias Españolas.

Y allí, en la ciudad del Turia comienza esta historia. Son historias de un barrio de manos del hilo conductor de una familia. Muchas familias tendrán también muchas cosas que contar, buenas y malas, grandes, pequeñas, y que pensamos que no deberían perderse porque forman parte de la historia. En el número 90 de esta calle (actualmente 92) vive la familia Oltra.


(9/1950) El comunicado reposaba encima de la mesa camilla. Escueto, ajeno al dolor que había causado.

«Les comunicamos que Francisco Oltra Paricio ha muerto de hemorragias internas y ha sido enterrado en el cementerio de Santa María de Marles».


Cuando se lee sobre una época, lamentablemente, los grandes personajes, batallas, políticas...son el guión que nos muestran.

También hay otros guiones, sobre todo en el cine y en la tv, que nos muestran las cosas que fueron importantes para sus ideales políticos.

Mis buenos fueron muy buenos y los otros, poco menos que diablos. ¡No es verdad! En todas partes hay buenas y malas personas y si todas las personas supieran respetar las ideas de los demás todos seríamos más felices.

Este libro es, sencillamente, algunos capítulos de la historia de una familia, mi familia, desde un poco antes de comenzar la guerra hasta la riada de Valencia.

No hay buenos y malos, hay hechos ciertos vividos por mi familia y que parece que nunca hayan pasado. Es lamentable que todo se distorsione en lugar de dar los datos y que cada cual saque sus conclusiones.

No busqueis en la historia el coche de la calavera o al terrible Zapatones, aunque si que encontrareis el por que mi padre, anarquista, apreciaba tanto que mi madre le llevara a la cárcel, algodón.


Y esto es salvajismo.

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