Eleno se rasca un poco la cabeza, se toma un par de tragos de su cerveza y alzando la voz pregunta.
-¿Alguien coincide conmigo en que los animales son cada día más listos y el ser humano más zoquete?
Y los concurrentes al bar, alzando la mano contestan al unisono...¡YO!
Y Eleno que hoy está inspirado le dice al padre Vicente.
-¿Por qué nuestra cultura está pudriéndose Padre Vicente?
-Sencillo -le contesta-, amigo Eleno, somos ya demasiados y Dios no puede atender a tantos.